Los deportistas argentinos siguen sumando medallas en estos Juegos Paralímpicos Tokio 2021 y en esta oportunidad fue Matute De Andrade que se ubicó a 2s 68 de la dorada, que quedó en manos del chino Hongguang Jia con 1m12s72. El podio lo completó el croata Dino Sinovcic con 1m15s74.

En las Eliminatorias, Matías había quedado 1° en su serie y 2° en la general con un tiempo de 1m14s38. Previamente, dijo presente en los 50m Mariposa, donde finalizó 13° con 35s77 y de esta manera se quedó con la medalla de Plata.

Por su parte Alexis Sánchez el atleta oriundo de Pergamino la rompió en su 1ra experiencia en Juegos Paralímpicos, donde además ocupó el 4° puesto (Diploma) en la final de los 400m, a sólo 0s39 del podio y registrando el nuevo récord parapanamericano.

En su carrera principal logró la medalla de bronce en los 100 metros T36. En menos de cinco años pasó de los Juegos Bonaerenses a brillar en el Estadio Olímpico de Tokio.

Alexis nació prematuro y le diagnosticaron parálisis cerebral con disociación en el movimiento. Su primer contacto con el atletismo lo tuvo a los 12 años (hace apenas 7) en la Escuela Especial Nº 503 de Pergamino. Ahí ganó su primera medalla. Ahí comenzó esta historia.

“Sus buenos resultados en los Juegos Bonaerenses y en los Evita lo acercaron al radar del cuerpo técnico de la Selección, que comenzó con un trabajo de monitoreo”, explica Andrés Buey, su entrenador y uno de los artífices de la Escuela Municipal de Deporte Adaptado de Pergamino creada en 2016.

En 2017 llegó su primer gran desafío a nivel internacional con los Juegos Parapanamericanos Juveniles de San Pablo. Ahí ganó tres doradas: salto en largo, 100 y 200 metros. “En Brasil demostró su gran proyección, pero después lo ratificó con solo 17 años en los Juegos Parapanamericanos de Lima (dorada en 100 y 400 metros) y con el 4to. puesto en el Mundial de Dubai en 2019”, afirma Buey.

El gran motor detrás de Alexis es su familia. Su madre y sus abuelos son un apoyo incondicional que lo motiva a mejorar y superarse cada día. Buey asegura que “Alexis siempre fue muy sociable, cariñoso y muy querido en todos los ambientes donde se mueve. Es de pocas palabras, pero muy demostrativo. Alexis es un chico que se merece estar en donde está. Siempre se sacrificó al máximo. Es un ejemplo y empuje para un montón de jóvenes que se están iniciando en el atletismo y el deporte adaptado”.

Los Murciélagos en la final de fútbol para ciegos cayó 1-0 ante Brasil en el gran clásico sudamericano y se alzó con la medalla de PLATA. 

La dorada sigue siendo esquiva, pero Los Murciélagos se suben, una vez más, al podio paralímpico y se cuelgan la plateada tras 17 años y una sobresaliente actuación a lo largo de toda la competencia.

El equipo dirigido por Martín Demonte se despide con 4 victorias (2-1 ante Marruecos, 2-0 ante España y 3-0 ante Tailandia, por la fase de grupos, y 2-0 ante China, en la semifinal) y tan solo 1 derrota.

Maximiliano Espinillo fue el goleador albiceleste y de la competencia con 7 anotaciones. Ángel Deldo y Nicolás Véliz completaron la cuenta, con 1 gol cada uno.

Es el 4to podio en 5 ediciones para el seleccionado nacional, que suma 2 PLATAS, Atenas 2004 y Tokio 2020, y 2 BRONCES, Beijing 2008 y Río 2016.

En el cierre de la competencia en Japón, la Delegación Argentina cerró una gran cosecha de 5 medallas de PLATA (Matías De Andrade y Fernando Carlomagno en Natación y Hernán Urra y Brian Impellizzeri en Atletismo) y 4 de BRONCE (Juan Samorano en Taekwondo y Alexis Chávez, Yanina Martínez y Antonella Ruiz Díaz en Atletismo). Además, es la medalla N°165 para nuestro país en Juegos Paralímpicos.

Los Murciélagos en Tokio fueron Darío Lencina y Germán Muleck (arqueros); y Federico Accardi, Ángel Deldo, Maximiliano Espinillo, Nahuel Heredia, Froilán Padilla, Marcelo Panizza, Braian Pereyra y Nicolás Véliz.

Además, el Cuerpo Técnico estuvo conformado por Martín Demonte, Germán Márquez y Claudio Falco (entrenadores Nacionales); Agustín Rojas (asistente técnico) y Juan Manuel Crespo (kinesiólogo).

Informe: AHORA CALAFATE - Paradeportes y Enard.