Ingreso a la Policía santacruceña ¿Por vocación o necesidad?

En lo que va del ciclo lectivo 2025, la Escuela de Cadetes de la Policía de Santa Cruz registró una deserción del 33% entre sus aspirantes de primer año, según detalló la comisaria inspectora Silvana Almendra en una entrevista con FM Dimensión. De los 75 cadetes que comenzaron el año, solo 50 continúan cursando.

“Ha habido una deserción importante en el primer cuatrimestre”, reconoció Almendra. Las causas son múltiples: exigencias académicas, dificultades personales, exigencia física, y una adaptación institucional que no todos logran atravesar.

A diferencia de otras carreras técnicas, en la Policía no se permite pasar de año con materias previas: “Hay materias cuatrimestrales y anuales. Si no aprueban, no pueden continuar”, explicó. 

Al ser consultada sobre qué motiva a los jóvenes a ingresar a la fuerza, Almendra fue directa: “No vamos a ser hipócritas: en general, los aspirantes buscan una salida laboral”.

Aunque reconoce que hay quienes tienen antecedentes familiares en la fuerza o llegan con una vocación definida, hoy la mayoría ve a la carrera como una oportunidad de estabilidad económica en un contexto de desempleo y falta de oportunidades.

Esto plantea un desafío para la institución: cómo construir una identidad policial sólida, aún en quienes no ingresan por vocación. “El gran desafío es formar a esos jóvenes desde el sentido de pertenencia. Que no solo estudien, sino que se sientan parte de la fuerza”, subrayó Almendra.

Para ello, la escuela implementa un enfoque interdisciplinario con apoyo psicopedagógico, social y psicológico. “Las nuevas generaciones traen otros condimentos, y hay que trabajar desde otro lugar”, remarcó.

FOTO y AUDIO. Cria. Inspectora Silvana Almendra 

La Escuela de Cadetes de Santa Cruz ofrece cinco tecnicaturas: Seguridad Pública y Ciudadanía, Gestión en Siniestros, Criminalística, Investigación Criminal y Tratamiento Penitenciario. La duración de la formación es de tres años, con un primer año de internado obligatorio.

Desde su ingreso, los cadetes reciben una beca mensual proporcional al sueldo de un oficial ayudante. En el primer año es del 25% del sueldo, en segundo año es del 35% y en el tercer y último año, del 45%. Este ingreso puede mejorar la retención de los estudiantes, aunque no garantiza permanencia.

La deserción y la falta de vocación definida son dos de los grandes desafíos que enfrenta hoy la Policía de Santa Cruz en la formación de sus cuadros. Aunque el ingreso sigue siendo alto, la permanencia no está asegurada. 

La comisaria Almendra lo resume claramente: “No es una profesión fácil. Por eso el proceso formativo tiene que ir más allá del contenido teórico. Hay que formar personas comprometidas”.