
ENTRE EL CALAFATE Y EL GLACIAR. Mientras el campo santacruceño sufre una de las peores sequías, un productor cosechó 200 mil kilos de pasturas que servirán para alimentar a su rodeo de vacunos durante todo el invierno. Alejandro Bárcena nos cuenta sobre su experiencia de ganadería intensiva, con pasto natural logrado sin riego. “El cambio climático vino y se instaló, entonces tenemos que adaptarnos”.