CARTAS ORGÁNICAS: UNA SOCIEDAD EN SERIO

“Subrayo, entonces, lo siguiente: nosotros, ciudadanos, delegamos enorme poder a las autoridades (ʽla bolsa y la espadaʼ, el presupuesto y la coerción legítima), a cambio de reservarnos el más amplio poder (que también es institucional) de crítica, control y censura de lo que el poder hace. Por eso es que importa tanto resistir toda extorsión moral que nos plantee (como querrá plantear siempre) el gobierno –cualquier gobierno– y quienes lo defienden. A ellos debemos recordarles que nuestro derecho a criticarlo y censurarlo forma parte de la esencia más noble del constitucionalismo democrático”. (1)

Roberto Gargarella (1964)

Toda iniciativa busca un cambio: de una situación A se intenta llegar a B; es como una flecha que certeramente impacta en el blanco; es exitoso sí genera la modificación esperada, en cambio la rutina, como mucho, mantiene la situación pero nunca la altera en algún sentido: siempre lo hicimos así.

El confort de lo conocido aquieta las aguas, el accionar tiende al desarrollo; cada uno elige su intervención en el presente: hacer o dejarse estar, he ahí el dilema.

Las consignas machacadas por los fanáticos con anteojeras mentales solamente satisfacen a los repetidores seriales.

AL RESPECTO

En uno de sus magníficos monólogos, Hamlet en soledad reflexiona: “¿Qué es el hombre si el principal bien e interés de su vida no es otra cosa que dormir y comer? Una bestia, nada más. Seguramente, Aquel que nos ha creado con una inteligencia tan vasta que abarca lo pasado y por venir, no nos dio tal facultad y la divina razón para que se enmoheciera en nosotros por falta de uso. Ello es que, sea olvido bestial o algún tímido escrúpulo de reflexionar en las consecuencias con excesiva minucia (reflexión esa que, de cuatro partes, tiene una sola de prudencia y siempre tres de cobardía), yo no comprendo por qué vivo aún para decir: ʻeso está por hacerseʼ, puesto que tengo motivo, voluntad, fuerzas y medios para ejecutarlo. Y no es que me falten, para exhortarme, ejemplos patentes como la tierra”. (2)

DE ESTO SE TRATA

Involucrarse significa reflexionar y, entre otras, debatir sobre las prioridades como, así también, definir con claridad determinadas estrategias.

Estas cuestiones, sin duda, pueden implicar, por caso, una revisión importante de lo realizado con anterioridad, modificación de objetivos generales, etcétera. A veces, provoca que algunas cuestiones queden más visibles a la manera de un espejo de aumento; después, tener o no la perspicacia de verse reflejado en detalle queda en cada uno. También implica perseverancia desdeñando los endebles facilismos, se trata de tener tesón fundado en el convencimiento de que la idea es factible y, a veces, en la inteligente capacidad de atraer los recursos necesarios y suficientes para el cometido propuesto.

Con frecuencia, el éxito es posible por la causalidad, por haber estado atento en el momento y lugar preciso y, sobre todo, por la presencia de ánimo sostenida en el tiempo; con respecto al célebre Mito de Sísifo, el Premio Nobel de Literatura argelino (1957) Albert Camus (1930-1960) escribió en 1942: “El esfuerzo mismo por llegar a las cimas, basta para llenar un corazón de hombre. Hay que imaginarse a Sísifo dichoso”. (3)

AL LEVANTAR LA VISTA

Casi siempre encontraremos alternativas que antes carecían de valor o no eran identificadas adecuadamente: “Muchas organizaciones no gubernamentales, fundaciones, grupos de ciudadanos, y organizaciones multilaterales están experimentando sus propios cambios fundamentales, motivados por la necesidad de convertirse en más sostenibles y de mejorar su efectividad. Ahora, muchos de estos grupos están preparados y son capaces de ayudar a las empresas a operar en países y barrios pobres. Estos también entienden como las empresas pueden ayudarles a convertir sus metas en realizadas con mejor saneamiento, provisión de agua, cuidado para la salud, vivienda y oportunidades empresariales en el mundo en desarrollo”. (4)

AVANZANDO

El desarrollo social es un continuo, con sus luces y sombras, que está basado en la interdependencia en muchos aspectos que, también, contribuye al desenvolvimiento de las iniciativas y la libertad de cada individuo.

Un claro indicador del nivel de calidad de una comunidad es observar en detalle las alianzas existentes en su seno y las relaciones con otros grupos; los que hacen alarde de vivir al margen de los demás pueden subsistir pero difícilmente podrán acrecentar sus propias posibilidades de generar lo necesario para su propio bienestar.

Las ciudades, provincias y países que se aíslan, a la corta o a la larga, sufren consecuencias altamente negativas.

En ese sentido, uno de los fundadores de la sociología, el controvertido británico Herbert Spencer (1820-1903), en 1860, escribió: “En el hombre primitivo y en el poco civilizado no existe el carácter requerido para una amplia cooperación voluntaria. El hecho de asociar sus esfuerzos a los de otras personas para la obtención de una común ventaja implica, si la empresa es vasta, un grado de perseverancia que él no posee. Además, cuando los beneficios de que se trata están remotos y son pocos comunes, como ocurre con aquellos para los cuales combinan hoy sus actos los individuos, exigen en los de mutuo acuerdo los persigan una fuerza de imaginación constructiva que falta en la inteligencia de los hombres no civilizados”. (5)

SIN DUDA

Las constitucionales cartas orgánicas son el encuadre legal que el sistema federal argentino estableció desde los orígenes de la consolidación nacional, a mediados del Siglo XIX.

Principalmente, la participación ciudadana se ve particularmente favorecida cuando cada comunidad habilitada se rige por su respectiva Carta Orgánica.

En tal sentido recordemos que, Patagonia es un muy ejemplo exitoso salvo Santa Cruz que es la única provincia sin ninguna ciudad constitucionalmente habilitada con su respectiva Carta Orgánica.

Ojalá que pronto los vientos propicios…

NOTA Y REFERENCIAS

Alejandro Rojo Vivot, especialmente invitado, en varias oportunidades, brindó asesoramientos comunitarios en Honduras, CA.

1) Gargarella, Roberto. Límite al poder. El valor del impeachment en la democracia constitucional. La Nación. Buenos Aires, Argentina. 11 de octubre de 2025.
2) Shakespeare, William. Hamlet. Centro Editorial Artístico de Miguel Seguí. Página 164. Barcelona, España. 1910.

3) Camus, Albert. El Mito de Sísifo. Editorial Losada. Tercera edición. Buenos Aires, Argentina. 1985.

4) Oportunidades de negocios para reducir la pobreza. World Bussiness Council for Sustainable Development. Página 14. Ginebra, Suiza. Julio de 2006.

5) Spencer, Herbert. El individuo contra el Estado. Imprenta y Litografía de José María Ariza. Página 221. Sevilla, España. 1885.

Por Alejandro Rojo Vivot - Escritor.