La mujer policía que se convirtió en heroína, ya había salvado a otros dos niños

la mujer policía Nadia Cáceres se convirtió en una heroína al salvar la vida de un bebé de 15 días que había sufrido un episodio de muerte súbita. El dramático suceso fue el viernes por la noche 

En la tarde del sabado, Cáceres habló con Ahora Calafate y reveló los detalles. Además indicó que es su tercera intervención para salvar la vida a niños, a lo largo de sus 18 años de servicio.

Una noche de tensión en la Comisaría Primera

La noche del viernes, la guardia de la Comisaría Primera se vio alterada por la llegada de Belén, una joven madre que, desesperada, pedía ayuda para su bebé Luca Benjamín, quien "estaba muerto", según manifestó la mujer.

La Sargento Cáceres relató: "A las 21:35, en la guardia de ayer a la tarde, ingresó una señora a los gritos, abre la puerta bruscamente y al yo mirar, observo que la señora venía gritando y manifestando que tenía a su hijo, que lo ayudó a su hijo, que su hijo estaba muerto".

Ante la gravedad de la situación, la policía actuó con rapidez, tomando al bebé en sus brazos y comenzando con las maniobras de reanimación.

"Le pedía a mi viejo que me ayude"

La Sargento Cáceres describió los tensos momentos en los que luchaba por salvar la vida del bebé: "Lo puse boca arriba y lo observo, estaba todo morado, tenía las manos rígidas primero, o sea como los puñitos muy entumecidos, muy cerrados y estaba muy frío, entonces empecé a hacerlas, lo puse... O sea, sin reacción estaba totalmente. Sí, sin reacción, no tenía pulsaciones, porque fue lo primero que hice, en la muñeca no tomé, hice en el cuello tampoco tomé, entonces automáticamente supe que tenía que hacer la reanimación de Heimlich".

Durante siete minutos que parecieron interminables, la mujer policía realizó las maniobras de reanimación, mientras su compañero, el sargento primero Maray, llamaba a la ambulancia.

"No sé cuántos minutos me han pasado, el bebé empieza a respirar, me hace una respiración medianamente corta, no sé cuánto tiempo, pero fue ahí nomás y volvió a caer, así que tuve que seguir haciéndole reanimación. Pero ya tenía dolencias en mi cuerpo", relató la Sargento Cáceres.

En ese momento crítico, la policía recurrió a su fe: "Yo le pedía a mi viejo que me ayude", confesó emocionada. El padre de Nadia, Jorge Cáceres, fallecido hace 12 años era un referente del turismo en El Calafate.

Finalmente, la policía escuchó el llanto del bebé: "Sentí el llanto y listo, lo abracé hacia mí y ahí lo contuve y empecé a darle calor porque estaba muy frío".

Tercer rescate

Este acto heroico no es un hecho aislado en la carrera de la Sargento Cáceres. Con humildad, la policía relató que "llevo 18 años de servicio y esta es la tercera criatura que salvo".

En Río Gallegos, salvó a "una nena de 3 años, que se atoró con un chupetín". Y en El Calafate, junto a un oficial, auxilió a "una nena de 7 años llamada Morena, que también estaba sin signos vitales".

Ante estos antecedentes, la Sargento Cáceres comentó: "La mayoría dice que soy un ángel, pero...".

Además de su vocación de servicio, la Sargento Cáceres es entrenadora de fútbol, una pasión que comparte con su familia. Ya también ahi le tocó asistir a algunos niños, aunque por cuestiones no tan delicadas. “También tengo por ahí episodios con mis jugadores, convulsiones y demás. Y también acudo con los otros equipos, así que voy y vengo", contó la policía.

La Sargento Cáceres también abrió en El Calafate una filial de Talleres de Río Gallegos, club fundado por sus primos.

Conmovida por lo sucedido, la Sargento Cáceres le envió un mensaje a Luca Benjamín: "Benja, volviste a nacer. Te voy a recordar siempre".

Este acto de valentía y entrega pone de manifiesto la importancia de destacar la labor policial y el espíritu de servicio de los efectivos, quienes muchas veces son criticados, pero que también están presentes para proteger y auxiliar a la comunidad en momentos de extrema necesidad.