La localidad de El Calafate sigue conmocionada por el sangriento crimen de Soledad Burgos, ocurrido en la vía pública en la mañana de ayer, martes.  Por el hecho continúan detenidos e incomunicados Luis y René Zuñiga (padre e hijo), y se espera que mañana jueves sean indagados por el Juez Carlos Narvarte, quien hoy se encuentra tomando declaración a testigos del hecho.

Como informó Ahora Calafate, al momento del ataque Soledad estaba acompañada de dos familiares, un hermano y un sobrino (este menor de edad). También comentamos que se secuestraron tres armas blancas (una en la vereda y dos en la vivienda de los Zuñiga) y ropas ensangrentadas.

Miguel Ángel Burgos es uno de los hermanos de Soledad.  Accedió a hablar con Ahora Calafate. Con una mezcla de tristeza, bronca e indignación, contó que “mi hermana está irreconocible” por los golpes que tienen la cara y puntazos en todo el cuerpo.

El ataque fue breve pero violentísimo y con ensañamiento. Miguel dijo que Soledad y sus dos familiares pasaron frente a la casa de los Zuñiga. No está claro que fue lo que encendió la agresión. 

El entrevistado contó que en un momento los ocupantes de la vivienda salieron con cuchillos. René salió primero y  atrás salió el padre revoleando un cuchillo en la mano y otro más corto. Los hace correr a mi hermano y a mi sobrino a la esquina porque no tenían armas ni nada”.

En cambio Soledad se quedó, al parecer discutiendo con una mujer. Es allí cuando fue atacada. Tras correr hasta la esquina, los jóvenes se dieron vuelta y la vieron a Soledad arrodillada agarrándose el cuello. “Le dijeron levántate Sole. Ya no podía hablar le salía sangre por todo el cuerpo”, contó.

“Mi hermana estaba parada. La agarraron y se sacaron toda la bronca con ella” dijo. Sobre las lesiones que recibió la mujer de 36 años, Miguel dijo “tiene los dos brazos todos cortados, puñaladas debajo de las costillas, en el cuello, en la cara” además de golpes. 

“Lo único queremos de Justicia. Que ellos paguen. Nadie le va a hacer nada a la familia. Ni a los hijos, ni sobrinos ni a las mujeres no les vamos a hacer nada. Pero que paguen por lo que hicieron. Que queden presos Esto no puede quedar así. Matar una mujer. La golpearon, la patearon. Se murió en los brazos sangrando, pidiendo que no quería morir”, contó a Ahora Calafate.

La familia Burgos también exige que se los cite a declarar a la mujer que acompañaba a los Zuñiga. Por la tarde surgió el dato que podría haber habido mas personas en el lugar.

Consultado sobre la mala relación entre las familias, Miguel Ángel dijo que algunos “se tenían bronca hace rato”, por “discusiones de borrachos”. Éste enojo fue creciendo y el año pasado uno de los hermanos Burgos sufrió una paliza.

Sobre el tema, Miguel contó que el  padre (Luis Zuñiga) una vez fue pedir perdón por lo que le hicieron a otro hermano mío. Por la paliza que le dieron término en el hospital internado.  Pero el gordito (René) nunca fue a pedir disculpa.

En la entrevista Burgos exigió que el Juez Narvarte, al que criticó, no otorgue privilegios a los detenidos y que los mantenga presos en otra localidad. “Quiero que queden preso y que paguen. Sino esto no se va a terminar más. A mi hermana no me la va a devolver nadie. Dejo un bebé de 2 años, una nena de 7, otro de 13 y una de 18. Nos arruinó la vida a todos.