CARTAS ORGÁNICAS: CON LA VOZ PROPIA

“Toda mi atención suelo fijarla siempre en hacer algún bien con mis discursos, y si esto no lo consigo a lo menos en no hacer ningún mal”. (1)

 

Marco Tulio Cicerón (106 a.C-43 a.C)

 

Para las comunidades plenamente autónomas las respectivas cartas orgánicas son una de las bases principales para el desarrollo pleno de cada habitante como de la sociedad.

Más aún en épocas de sesgos autoritarios, nepotismo, concentración de poder público, falta de alternancia, etcétera; hay quienes viven de la política hace décadas.

La autonomía es tal cuando se ejerce pues en caso contrario posiblemente quede en algún texto o directamente en el olvido.

Además, están los que les conviene en lo personal que no han favorecido la redacción de las cartas orgánicas pues de alguna manera se benefician como, por caso, perpetuándose en el poder, compra de voluntades, persecución de críticos, etcétera.

¿Por qué son tan infrecuentes o nulas las consultas populares?

AVANZANDO

Sin que sea necesario ser un gran especialista es ampliamente conocido que nadie nace sabiendo, que los aprendizajes son un continuo, que las historias personales y sus contextos influyen, que algunos pueden tener ciertas facilidades y otras dificultades específicas; tal como lo afirmó hace siglos el español Quintiliano: “El poeta nace y el orador se hace”.

Podemos asemejar el aprender a hablar en público a lograr andar en bicicleta, desde los más elementales movimientos, incluyendo caídas, hasta competir olímpicamente, hacer piruetas en una rueda y cientos de destrezas extraordinarias dignas del Cirque du Soleil, que se inició en Canadá en 1984, luego de años como un espectáculo callejero, conociendo muchos fracasos antes de triunfar.

Desde luego que al comenzar conviene emplear rueditas de apoyo. Otro tanto nos sucede cuando procurarnos adentrarnos en la práctica de la natación: luego de las explicaciones de rigor, algunos ejercicios, entramos al agua primero tomados del borde y, si es imposible, haciendo pie para luego, braceando y pataleando, tragando un poco de agua, llegamos a la otra orilla; el miedo y las inseguridades iniciales se convierten en satisfacción por el éxito logrado; quizá algún día crucemos a nado en Canal Beagle, el Estrecho de Magallanes, el Lago Argentino o, simplemente, cada tanto nos demos un chapuzón reconfortante recordando con una sonrisa a medio camino lo que vivimos al principio.

ADEMÁS

Vale tener presente el dicho popular: a las palabras se las lleva el viento, dando crédito únicamente a lo plasmado por escrito cuando, en realidad, ni una ni la otra es garantía excluyente de cumplimiento ni de responsabilidad con respecto a lo sostenido; los ejemplos son muchos en ambos sentidos pero, siempre, la honorabilidad de los involucrados contribuye decididamente en uno u otro sentido.

Recordemos discursos de ciertos empleados públicos trabajando como altas autoridades que, con alguna asiduidad, afirman mentiras, dislates, imprecisiones y falacias como escritos que hacen otro tanto y que enarbolan como única excusa cuando son puesto en evidencia que se trató de un error involuntario volviendo a emplear un concepto anodino ya que, por definición, en el fallo no interviene la intención de concretarlo.

A lo dicho sumamos que, son frecuentes los chapuceros que denotan una gran irresponsabilidad en algunas de sus afirmaciones que, más graves son, cuando se presentan con pomposidad desmedida. De lo prosaico difícilmente se vuelva pues se ingresó de lleno en el ridículo.

Tal lo expresado en la Declaración Universal de Derechos Humanos: todo ser humano es único e irrepetible, se desarrolla en libertad y tiene igual dignidad y derechos, libertad de pensamiento y entre otras, “el derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar, recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”. (2)

ENTONCES

Expresarse es una facultad inherente a todo individuo, aun recordando que habrá quienes tienen serias dificultades físicas e intelectuales y que pueden necesitar emplear aparatos, intérpretes como los del lenguaje de señas, etcétera, sin olvidarnos de las personas con discapacidad intelectual severa y profunda. Y hay otros que sufren muy serias carencias socioeconómicas aunque las autoridades insistan que son casos excepcionales y que muchos años de gobierno son insuficientes para que la población en su conjunto acceda al ejercicio de todos los derechos humanos.

EN EL CONTINENTE

Una parte de la población de América subsiste en la pobreza en países con grandes asimetrías económicas y sociales.

Muchos proyectos globalizadores gastaron fortunas para luego irse diluyendo sin haber concretado casi nada o nada.

Pero, aún en crisis bastantes sociedades lograron mantenerse: “Pese a la pandemia, el número de democracias en las Américas se mantiene igual que hace dos años. Además, la mayoría de las democracias de la región demostraron una gran resiliencia frente al efecto disruptivo de la pandemia, y los Parlamentos, los Poderes Judiciales y los medios de comunicación de la mayoría de las democracias lograron adaptarse y seguir ejerciendo sus funciones de control, aun en medio de numerosas restricciones que dificultaron su labor”. (3)

Aunque lejos esté el horizonte de la amplia libertad individual y el inteligente desarrollo alejado de autoritarios dogmatismos.

El desarrollo de las democracias locales con la participación activa de los respectivos vecinos puede ser eficiente en la consolidación de escenarios políticos y sociales que propendan a la generalización del bienestar humano, sin discriminaciones de ninguna naturaleza.

NOTA Y REFERENCIAS

Alejandro Rojo Vivot fue Asesor en el Senado de la Nación (1973-1976).

1) Cicerón, Marco Tulio. Diálogos del orador. EMECÉ Editores. Página 182. Buenos Aires, Argentina. 9 de octubre de 1943.

2) Naciones Unidas, Asamblea General. Declaración Universal de Derechos Humanos. París, Francia. 10 de diciembre de 1948.

3) Internacional Institute for Democracy and Electoral Assistence. El Estado Global de la Democracia 2022. Forjando contratos sociales en tiempos de descontento. International IDEA’s Global State of Democracy. Estocolmo, Suecia. 2022.

Por Alejandro Rojo Vivot - Escritor